Para Urretabizkaya, el gobierno nacional busca intervenir el INTA

El 9 de Julio finaliza el período de facultades delegadas por el Congreso de la Nación al Poder Ejecutivo que le permitieron al presidente Javier Milei y al ministro de Desregulación y Transformación del Estado, Federico Sturzenegger, llevar adelante un conjunto de medidas tendientes al achicamiento del Estado.
En el marco de las últimas decisiones adoptadas por el Ejecutivo, se firmó el decreto 447/2025 que modifica la Agencia Nacional de Promoción de la Investigación que hasta el momento subsidiaba proyectos científicos y tecnológicos en institutos nacionales y universidades.
Para entender las implicancias que acarrea la herramienta jurídica, “Clave Política” entrevistó al decano de la Facultad de Ciencias Agrarias de la Universidad Nacional de Lomas de Zamora, Néstor Urretabizkaya.
Se sabe que hasta el momento el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) tenía un consejo directivo nacional conformado por un presidente y un vicepresidente, además de once directores nacionales; pero el decreto incidió considerablemente en su conformación. Al respecto, el decano resaltó: “La medida gubernamental generó una reducción muy drástica de los directores nacionales”.
“Esa reducción hace que esa comisión directiva esté conformada solamente por ocho miembros, cuatro corresponden al Poder Ejecutivo y cuatro están en representación de las entidades del campo. Ante el peor escenario define el presidente por voto doble lo cual es una intervención directa al organismo“, indicó Urretabizkaya.
Esto provoca que las decisiones pasen por el Poder Ejecutivo y sean “prácticamente unilaterales”, afectando al organismo por “el recorte del presupuesto y por la falta de horizontes en cuanto a la cartera de proyectos, ya que los científicos se encuentran muy limitados para la investigación”, sostuvo el decano y agregó que ello “dificulta saber a ciencia cierta sobre a qué se va a dedicar el INTA a futuro”.
Como representante de los decanos de Agronomía de la provincia de Buenos Aires en el INTA, Urretabizcaya señaló que se realizan propuestas de “salida voluntaria” con lo que evitan los despidos, pero que “a corto y mediano plazo va a generar la falta de investigadores calificados” y “el gobierno tendrá un INTA totalmente desfinanciado” y con herramientas para que “no investigue ni produzca nada porque los investigadores se habrán ido al sector privado”.
En un análisis de la situación universitaria y en adición a lo que sucede en el organismo nacional, resaltó que hay investigadores y docentes que se dedican full time cuyo “único ingreso es el de la universidad”. Por contrapartida, hay docentes “de dedicación simple” que complementan sus ingresos con otro trabajo.
“Hoy formar un investigador lleva muchísimo tiempo de inversión, no solamente de tiempo de capital humano sino de dinero y cuando están maduros para hacer el aporte que nosotros queremos en las universidades para el crecimiento en la investigación se tienen que ir porque la comparación con el sueldo es complicada”, agregó Urretabizkaya sobre la coyuntura que atraviesan los científicos e investigadores.
Además, el magíster destacó la necesidad recíproca que tienen las casas de altos estudios y el sector privado, ya que las empresas “necesitan del aporte que hacen las investigaciones de la universidad” y por su parte «hay un montón de empresas de maquinaria agrícola que acompañan económicamente y realizan convenios para mejorar los laboratorios y otros espacios de investigación”.
El funcionario ponderó los programas de extensión que se llevan adelante desde Agrarias de UNLZ en distintas ciudades del interior de la provincia de Buenos Aires, como Azul, Ayacucho, San Vicente o General Belgrano, que generaron “buenos resultados” ya que este año la Facultad tuvo “récord de ingresantes”.