Preocupación ante la posible suspensión en el funcionamiento de un Observatorio espacial de San Juan
Una carta abierta que difundió una astrónoma, docente e investigadora de la Universidad Nacional de San Juan, destinada al presidente de la Nación, Javier Milei, encendió alertas respecto la posibilidad de que se produzca un freno en el desarrollo de un Observatorio espacial. Se trata del espacio ubicado en el complejo astronómico El Leoncito, denominado “Radiotelescopio Argentino Chino”, en el que interviene además de la casa de altos estudios, el Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Tecnológicas (CONICET) y la Academia de Ciencias Chinas.
La profesional que redactó la misiva es Carolina Del Valle Garay, quien fue consultada por “Modo Universitario” sobre su publicación a través de sus redes y también con un envío explícito a Casa Rosada.
Garay remarcó que se trata de “un proyecto exclusivamente científico” y negó que fuera “un radar” que persiga otros fines. En tal sentido, indicó que con los radiotelescopios “se puede descubrir mecanismos de formación de galaxias que están en interacción y cómo es el mecanismo de interacción entre sistemas estelares”, entre otros alcances.
Sobre el dispositivo, confirmó que “dentro de poco va a ser el más grande de América del Sur” y en cuanto a la funcionalidad, sostuvo: “Observamos fuentes, se pueden hacer estudios de placas tectónicas, de cómo va variando la cantidad de nieve en los polos, cómo aumenta el agua de los mares”.
Por Radio Conurbana, la astrónoma explicó cómo se dividen los roles en materia de investigación y destacó que una parte la realizan los ingenieros de nuestro país, en tanto que hay tareas reservadas para los profesionales chinos.
“Todo lo que es el desarrollo de la parte tecnológica la estamos haciendo en San Juan con un equipo de ingenieros, teníamos la información que volvían los chinos en marzo para ensamblar todo, ya estaba la logística”, agregó.
Para desmitificar que existan cuestiones de incidencia regional y acuerdos favorables a China como potencia en cuanto a factores de la geopolítica, Garay fue contundente y exhortó a que se respeten los acuerdos firmados. Es que el proyecto surgió en 2011 y el temor de que se suspenda es notorio por parte de quienes trabajan para el desarrollo del Observatorio, que además está “en un 90%”.
“Tenemos que respetar el acuerdo que se firmó y además la gente que viene de China, los técnicos e ingenieros, conocen otros radiotelescopios y los han armado. Ellos tienen mucha experiencia, pero nosotros aportamos con la parte tecnológica. Es imposible que lo podamos terminar solos, porque además China ha contribuido con el dinero que no tenemos”, resaltó.
Por último, la docente investigadora ponderó la importancia de la ciencia ya que consideró que es “a través de la ciencia que se crece”, y acotó que en el hemisferio sur “hay muy pocos radiotelescopios porque todo está en el hemisferio norte, que es donde lo pueden pagar”.
“Con los chinos se viene trabajando hace más de 30 años y esto tiene que ver con la ciencia, no con los gobiernos”, concluyó.